Su día se celebra cada 14 de febrero, es cierto, pero, igual que otras
tantas leyendas mercadotécnicas, ya no se sabe exactamente a quién alude
esa abstracción llamada san Valentín. Según mi tía Eloína se trata del
auspiciador y protector de los amoríos a quien los comerciantes idolatran y
algunas suegras detestan, no precisamente por ellas, sino por los/las “peor es nada”
que a veces consiguen sus hijos o hijas.
Como muchos de los integrantes del santoral cristiano, hay serias dudas
acerca de la existencia real de ese casto caballero a quien desde hace mucho
los enamorados han rendido culto. ¿Quién era?, ¿de dónde salió?,
¿por qué se le venera un día antes del cobro de quincena? Algo similar al
archiconocido “día de la secretaria” o al “día del niño”. Uno celebra sin
conocer la explicación por la cual lo está haciendo. Si de verdad hay un
día de los enamorados, ¿por qué no incorporar al calendario otros festejos como
“la noche de los desenamorados”, “la madrugada de los despechados”, “el
amanecer de los maleteados”.
Un verdadero misterio este santurrón presuntamente enamoradizo que en cada
mes de febrero, a pesar de la inflación, todavía parece mover más dinero que cualquier
marca comercial de moda. Pero la leyenda existe y eso no se discute.
Cuenta también la leyenda que, precisamente, en eso radicaba el gozo de
aquel inquieto medicura, a quien más bien deberíamos recordar como san Valentón,
ya que, en acto de abierta afrenta oposicionista contra el emperador de turno,
disfrutaba celebrando himeneos castrenses clandestinos. Con su actitud
retadora, aspiraba a darle dolores de cabeza al monarca aunque,
lamentablemente, por valiente, terminó precisamente decapitado.
Otras versiones menos trágicas aluden a dos personajes que, en
apariencia, poco tenían que ver (explícitamente) con las pasiones amorosas: un
antiquísimo obispo san Valentín, de la ciudad italiana de Terni, y otro llamado
Valentín de Recia. Del primero se sabe que el día 14 de febrero son sus fiestas
patronales. Ya eso nos ofrece un lugar en el almanaque. Del otro se ha dicho
que siempre ha sido venerado por algunos cristianos, gracias a sus facultades
celestiales y don particular para curar a personas epilépticas.
Es decir, si quisiéramos entender el auténtico misterio de la fiesta y
los amoríos que despierta san Valentín en febrero, pues no se haría difícil
pensar que los tres se han vuelto un solo y único mito y, además, buscándole
coherencia a este asunto, directa o indirectamente, todos tienen que ver con
las coyuntas amorosas. Uno, por los casorios prohibidos, es obvio; otro, porque
nos legó la fecha, y el tercero, debido a que, a lo mejor, hay relaciones
amorosas que alteran la actividad eléctrica del cerebro, como la epilepsia
(aparte de que, si la pareja incurriera en ciertos excesos amoriles, podrían
terminar ambos epilépticos).
De allí que mi tía Eloína haya opinado desde siempre que ese santo
cachón al que mientan Valentín ha sido valiente y muy valeroso y, además, de
acuerdo con su mítico origen, trivaluado, porque vale por tres. Lo más
importante de esto es que, cualquiera que sea la historia real detrás de la
fecha, están de por medio la pasión y los afectos. Prohibidos, permitidos,
clandestinos, escondiditos, a tiempo completo, a tiempo parcial o como fuere.
Lo de relacionar este mismo día con la “amistad”, nadie sabe de dónde
salió, pero ese sí que luce como un invento comercial más reciente. Un
añadido capitalista tal vez pensado para aumentar las posibilidades de marketing.
San Valentín es adicionalmente un santo de consenso indudable: aparte de
los cristianos, lo celebran también los ortodoxos, los luteranos, los
anglicanos, los agnósticos y los ateos. Casi como para solicitar su asesoría en
estos tiempos en que tanta falta nos hacen la concordia, los
acuerdos y los milagros que nos devuelvan la felicidad. Y no solo en asuntos
del corazón.
1 comentario:
quisiera preguntarle, quien es esa sra. Eloina a quien usted le hace mencion tanto en esta publicación como en muchas de sus publicaciones en su blog, debido a que tengo que hacer un trabajo de investigacion y una de las correcciones que me hicieron fue quien era ese personaje llamado tia eloina, espero su pronta respuesta
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